Alarma en el festival de otoño: ¡los borrachos de Múnich atacan!
Conflicto en el festival de otoño de Ingolstadt: un hombre borracho de Múnich hirió a un hombre de 38 años de Neuburg-Schrobenhausen.

Alarma en el festival de otoño: ¡los borrachos de Múnich atacan!
La tarde del lunes 1 de octubre de 2025 hubo mucho entusiasmo en el festival de otoño en Ingolstadt. Alrededor de las 19:40 horas. Se produjo un altercado físico entre un hombre de 28 años de la zona de Munich y un turco de 38 años del distrito de Neuburg-Schrobenhausen. El más joven de los dos golpeó a su oponente una vez con el puño, lo que le provocó heridas leves. Estos disturbios, que perturbaron el ambiente festivo de la fiesta, fueron rápidamente detectados por los servicios de seguridad.
Pero eso no es suficiente. El joven de 28 años, que estaba muy ebrio, no pareció impresionado por la situación. Después de que los agentes de seguridad lo expulsaran del recinto del festival, escupió dos veces en la cara a un empleado de 46 años. Una prueba de alcoholemia arrojó un nivel de aproximadamente 1,6 por mil y el hombre tuvo que pasar la noche en una celda de sobriedad en la comisaría de policía de Ingolstadt. Como informa Augsburger Allgemeine, el incidente fue un final amargo para una velada que para muchos debería haber terminado con alegría y celebración.
El caso en detalle
Para comprender mejor los antecedentes de la disputa, es importante observar de cerca a los actores. El joven de 28 años, cuyo nombre no fue revelado, obviamente había consumido demasiado de la buena bebida y perdió el control de sí mismo. Durante la agresión, el hombre de 38 años, cuya identidad tampoco fue revelada, sólo sufrió heridas leves que no tuvieron consecuencias graves. De nuevo Mensajero del Danubio Según se informó, el incidente fue rápidamente notado por las fuerzas de seguridad presentes, quienes actuaron con decisión para evitar una mayor escalada.
El animado ambiente de la fiesta de otoño, que suele caracterizarse por la diversión y la convivencia, podría perder algo de color debido a este incidente. Es de esperar que otros asistentes al festival aprendan la lección adecuada de este incidente, ya que tales arrebatos no sólo pueden arruinar la velada, sino que también pueden tener consecuencias graves.
En retrospectiva, es lamentable ver cómo el consumo de alcohol a menudo se convierte en agresión, sin mencionar la preocupante imagen que tales incidentes dejan en el público. El Festival de Otoño debe ser un lugar de alegría y no de violencia. Creemos en la cooperación respetuosa y esperamos que estos incidentes sigan siendo la excepción.